martes, 31 de julio de 2012

Hello, I'm leaving!

Desde que supe lo que era, siempre me llamó la atención la experiencia Erasmus. Al ser una amante de los idiomas y los países europeos, sabía que era una oportunidad que no podía desaprovechar. Así que en cuanto supe que al estar estudiando Traducción tenía la posibilidad de salir a estudiar al extranjero ya en el segundo año de mi carrera, no lo dudé y "eché los papeles".
Si os soy sincera, nunca soñé con irme de Erasmus al Reino Unido. Adoro el idioma inglés (es mi lengua B en la carrera, junto con el alemán como lengua C), pero siempre me imaginé pasando mi primer año en el extranjero en un país centroeuropeo o escandinavo, cuya cultura me resulta más atractiva. Sin embargo, cuando tuve que elegir mi destino preferí priorizar el perfeccionamiento de mi idioma favorito, cuyo aprendizaje nunca me tomé realmente en serio (soy la típica persona que aprendió inglés a base de leer por internet, escuchar música y fijarme en letreros y letras pequeñas de paquetes de galletas). La solución era el Reino Unido, y dentro de este Escocia parecía la región más encantadora, pero ¿qué ciudad elegir, Glasgow o Edimburgo? Edimburgo es la bonita, mientras que Glasgow es la grande... y en la que se celebran más conciertos. Me encanta la música, así que este último dato fue suficiente para decantarme por esta ciudad con fama de poco segura... aunque de eso me he enterado hace poco, y ya es tarde para cambiar, jaja.
Y esto es todo lo que puedo contar por ahora.  En las próximas entradas hablaré sobre mis primeros días británicos e intentaré resolver cuantas dudas pueda sobre los problemas que suelen surgir cuando te embarcas en una aventura como esta, esas dudas cuya resolución yo misma estoy echando de menos ahora...
xoxo !!!

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